Todos hemos participado en alguna reunión que se siente como una pérdida de tiempo, conversaciones que parecen más bien debates, o recibido invitaciones a participar en algo que terminan siendo algo totalmente diferente. Las personas quieren contribuir pero no saben cómo. Los líderes quieren alentar la participación pero no saben cómo. Esto nos dice que vivimos en un momento de fracaso institucional. Seguimos creando a nivel colectivo resultados que nadie quiere.
Vemos la necesidad, urgencia y oportunidad hoy en día en México de activar conversaciones significativas, de impulsar las fortalezas de las personas a través del liderazgo participativo con la finalidad de construir o re-construir el tejido social para enfrentar los retos actuales con soluciones creativas y detonar acciones que trasciendan. Trabajamos para desencadenar el poder de la colaboración en nuestros equipos para conseguir resultados más significativos e impactantes. Pensamos que es un trabajo profundamente personal, elaborado en colectivo y sumamente importante.